Hace unos días, la seño nos anunció que una persona muy
especial vendría a nuestra clase para hacernos una visita. Desde entonces,
hemos estado esperando la mar de impacientes.
La seño nos ha contado que es un personaje muy importante y
que tiene muchísimas ganas de conocernos, porque le han dicho que los niños del
colegio Sagrado Corazón y sobre todo los de Infantil son requetebuenos. No
paramos de preguntarnos quién será ese personaje tan misterioso.
Y por fin llegó el día. Como cada mañana hemos celebrado
nuestra asamblea, donde dialogamos un ratito sentados en círculo y donde
demostramos que ya vamos siendo mayores, que sabemos escuchar y que pedimos el
turno de palabra antes de hablar. Hoy sin embargo nos hemos sobresaltado
cuando, de repente, alguien ha pegado a la puerta de nuestra clase naranja…
Uhmm ¿quién será? dijo la superseño. Seguro, seguro, que
algún niño de la clase lila. Y allá que se ha ido a abrir la puerta. Y cuando
ha acabado de abrirla….oooohhhhhh, ¡sorpresa entre las sorpresas!
Entra en la clase, así como quien no quiere la cosa, un galán
de traje elegante, bombín y bastón. Al principio nos hemos quedado entre
boquiabiertos y extrañados, y por qué no decirlo, algo asustados. Hasta que hemos
caído en la cuenta…
¡¡El mismísimo Willy Fog!!
¡Qué alboroto! Sin pensarlo dos veces, le hemos invitado a
quedarse con nosotros pues queríamos conocerlo mucho mejor, así, en persona.
Era tan simpático que fue muy fácil para nosotros empezar a conversar con él.
Aparte de apuesto, era supereducado, y todo un caballero, por lo que antes de
sentarse con nosotros, nos saludó gentilmente y se presentó muy educadamente,
para luego preguntarnos a cada uno nuestros nombres.
Yo vivo en Londres, nos dijo, por si no lo sabéis, por lo que
soy de Inglaterra ¿Sabéis dónde está Londres? Luego nos contó que siempre le había
encantado viajar, y que se conocía casi todos los confines del mundo, desde el
Polo Norte, hasta las montañas más altas del Himalaya, desde las estepas
siberianas hasta las selvas de Borneo, desde el desierto hasta las hermosas
ciudades del Lejano Oriente. Y que viajar es tan necesario como el agua que
bebemos o el aire que respiramos, pues nos permite conocer otras gentes y otras
culturas.
Estábamos fascinados, y nos hubiese encantado que se quedara
todo el día contándonos mil historias.
Luego nos fue preguntando a cada uno por los lugares a los que habíamos
ido de viaje, y qué medio de transporte habíamos utilizado para llegar hasta
ellos.
(En este punto cada niño va relatando los sitios que ha
visitado, y el personaje que nos visita hace lo mismo, relatando uno de sus
maravillosos viajes)
Ahora que ya nos conocemos, y como ya os considero mis
amigos, me gustaría que me ayudarais. Mirad, hace poco hice una apuesta ¿sabe
alguien que es una apuesta? Bueno, pues yo he apostado con otros señores que
soy capaz de dar la vuelta al mundo, pero no solo eso, que soy capaz de hacerlo
en solo 80 días. ¿Lo lograré? ¿podéis darme algún consejo? ¿cuál es el camino más
corto? ¿por qué ciudades tengo que pasar? ¿Qué medios de transporte debo
utilizar? ¿cómo sortearé a los malvados que quieran ponerme trampas en el
camino para entretenerme y que no me de tiempo?
¡ Que rato tan bueno hemos pasado!
Después de dar las gracias a Willy Fog, sin más se
despidió de nosotros diciéndonos que
debía de marcharse para continuar su viaje.
Hemos realizado dibujos de los personajes del cuento y hemos
deseado “ Buen viaje” a Willy Fog.
GRACIAS A VICTOR POR SU COLABORACIÓN.
HEMOS DISFRUTADO Y
APRENDIDO MUCHAS COSAS.























No hay comentarios:
Publicar un comentario